Las investigaciones en el sector de la nutrición tratando de abordar la mayor cantidad de temas posibles. En ese sentido, análisis sobre el rol de la nutrición y la inmunidad el cuerpo se han ido ejecutando, para así disponer de más información, que sea precisa para mejorar la alimentación de las personas en todos los sentidos posibles.
En ese orden de ideas, la literatura científica nos permite llegar pronto a la conclusión, que existen evidencias sobre ese vínculo entre la nutrición y la inmunidad, aunque es clave que se tenga en cuenta la existencia de ciertas particularidades, por ejemplo, lo que sucede con los suplementos y su efecto en el organismo.
Una de las líneas que se encargan del estudio de este tipo de asuntos que son cada vez más importantes para la nutrición y la salud de los seres humanos, se denomina inmunonutrición, que se clasifica como una ciencia a través de la cual hay un estudio en profundidad sobre la relación de los nutrientes y la inmunidad. Los objetivos principales de este sector de la comunidad científica es que se conozcan los marcadores inmunológicos que están vinculados con el estado nutricional.
Debido a todo lo anterior, con el paso del tiempo se han conseguido desarrollar distintos modelos en torno a los compuestos que están presentes en los alimentos y cómo pueden influir en la respuesta que el cuerpo tiene desde el sistema inmunológico para poder enfrentar bacterias, virus o toxinas.
¿Qué es la inmunonutición? Los nutrientes que estimulan el sistema inmune
Las observaciones hasta la fecha han permitido identificar que existen cierto tipo de sustancias que presentan la capacidad de mejora en la inmunidad humana, o por lo menos es viable que se establezcan una serie de interacciones con este concepto. Pensando en lo anterior, se resaltan aquellos nutrientes que por sus características estimulan el sistema inmune, esto según la evidencia que se ha identificado con el paso del tiempo. No olvide que esto también es relevante al pedir Herbalife.
Glutamina
El primer ejemplo que se plantea en esta publicación es la glutamina. A grandes rasgos, es un aminoácido no esencial que tiene funciones vinculadas con la protección del tubo digestivo. En ese orden de ideas puede cumplir con un rol realmente importante. En el momento en que una persona opta por un proceso de suplementación con base en esta sustancia, se va a lograr una mejora en la mucosa intestinal, además de reducir la estancia en los hospitales para aquellos pacientes que presentan un trasplante de médula ósea.
Arginina
Es otro aminoácido que se incorpora en este listado. Para este caso tan particular, se encuentra la propiedad de una mejora en la función inmunológica de las células, al igual que la cicatrización de las heridas. Pese a lo anterior, las investigaciones resaltan que la suplementación con esta clase de sustancia tal vez va a reducir la respuesta inflamatoria. Por tal motivo, hay que esperar aún más estudios para que se pueda asegurar un determinado grado de eficacia.
Ácidos grasos omega 3
Son ácidos grasos que por sus características son una interesante opción para la regulación de la síntesis de eicosanoides, los cuales además pueden actuar como mediadores de una respuesta inmune. Igualmente, van a presentar un efecto antiinflamatorio muy importante que sirve para que se pueda contrarrestar el efecto inflamatorio que tiene el omega 6, el cual está presente en los alimentos procesados. Según las investigaciones científicas, siempre es necesario que se sostenga una alimentación balanceada entre todos los nutrientes para que no se produzca un estado de inflamación.
¿Cómo se puede mejorar el consumo de nutrientes para la inmunonutrición?
Teniendo como objetivo la optimización de la respuesta inmune del cuerpo, lo más conveniente en estos casos es que se realicen ingestas de proteínas de alta calidad todos los días. Según las indicaciones que la Organización Mundial de la Salud (OMS) entrega al mundo entero, la recomendación es que se ingiera al menos 0,8 g de proteína por kilogramo de peso corporal en el caso de las personas sedentarias. Por supuesto, la instrucción va a aumentar cuando se trate de un deportista.
Además de lo ya mencionado, bien vale la pena señalar que hay que tener en cuenta que el 50% del aporte de proteínas para el cuerpo tiene que ser de origen animal, buscando que así se asegure una ingesta en la que estén presentes todos los aminoácidos esenciales, en una proporción que sea la más adecuada para el cuerpo.
Con relación al anterior consejo, bien vale la pena que exista una prioridad por la ingesta de pescado respecto a la carne. Una de las explicaciones para la toma de esta decisión, es que, si se consume de manera regular el pescado azul, es mucho más factible que se pueda llegar a alcanzar cada una de las recomendaciones en torno al consumo de omega 3.
Para terminar con esta serie de aclaraciones, este nutriente también se puede encontrar en frutas como el aguacate o en aceites vegetales. De todas maneras, para el caso de los aceites es mejor que se consuman en crudo para que se evite la formación de diversos compuestos tóxicos que terminarían por afectar la salud.
¿Es la inmunonutrición igual a la suplementación?
Hay que empezar por recordar que la suplementación de nutrientes no se sugiere, a menos que exista necesidades especiales, patologías o deficiencias. Hasta la fecha, no se ha visto con seguridad, cuáles son los efectos que tiene la suplementación para ciertas vitaminas en el largo plazo.
Respecto a lo anterior, la única sustancia sobre la que se puede pensar que es favorable como suplementación para un espectro amplio de la población, son los probióticos. Igualmente, esta es una clase de sustancias que empieza a relacionarse de forma estrecha con la función del sistema inmunológico.
Por otro lado, el caso de la vitamina D a causa de su carácter deficitario, no se recomienda la suplementación por defecto. Hay casos que sí se pueden considerar aparte como los deportistas, en particular si se busca el máximo aumento de rendimiento.
¿Qué se debe tener encuentra sobre la inmunonutrición?
La inmunonutrición es una ciencia relativamente nueva que sigue teniendo mucho campo por delante. Más allá de lo anterior, ya ha descubrimientos muy interesantes al respecto. Asimismo, existen nutrientes que cuentan con la capacidad para que se mejore y se module la respuesta inmunológica.
En torno al caso de los probióticos, es mucho lo que se espera sobre ellos, ya que hay promesas por parte de los científicos para que se revolucione este sector en los próximos años. Lo más importante aquí es que se pueda dar una mejora en el conocimiento del genoma, lo que implicaría una evolución considerable hacia una nutrición individualizada y personalizada.
