Para contextualizar mejor la situación, las grasas saturadas son las que por sus características van a suponer un riesgo muy importante para la salud del organismo, pues el efecto que tienen sobre el cuerpo es el de incrementar la acumulación de colesterol en las arterias, lo que significa que pueden ser un factor para que se endurezcan o se obstruyan.
Uno de los problemas principales del estilo de vida actual en la sociedad, es que la dieta de la población se caracteriza por ser muy rica en alimentos con grasas saturadas o grasas trans, lo que implica que establecer este tipo de modificaciones en la alimentación y nutrición, sean procesos muy complejos.
En ese sentido, al momento de consultar por los Herbalife pedidos, lo que se suele hacer, es advertir a las personas de los riesgos de consumir con frecuencia alimentos con grasas saturadas en exceso. Tan sólo es necesario pensar que las carnes, lácteos, azúcar y buena parte de la comida que se etiqueta como rápida, en poco tiempo van a ser productos contraproducentes para el organismo.
Casi sin que la persona se pueda dar cuenta, son alimentos que restan años de vida y que acercan un ataque cardiaco, al igual que un accidente cerebrovascular en la vida.
Finalmente, vale la pena recordar que no se trata de eliminar en su totalidad este tipo de alimentos de la dieta, ni tampoco prescindir de cualquier clase de grasa, de lo que en verdad se trata, es en buscar una alimentación de calidad, variada y que gire en torno al equilibrio, en donde las cantidades sean respetadas y la pirámide nutricional sea la base a partir de la cual se seleccionen los alimentos.
Combatir las grasas saturadas con sandía
En la mayoría de los casos, las grasas saturadas van a provenir de los ácidos grasos que se consumen en los alimentos fritos, los productos procesados, al igual que los alimentos comerciales horneados. Tampoco hay que descartar las margarinas que son tan bien apreciadas por el gran público.
Ahora bien, es fundamental que se aprenda a consumir este tipo de alimentos con moderación y siempre haciendo todo lo posible por buscar alternativas que sea más saludables, con las que sea posible sentirse mejor y que además sean de su agrado.
Una de las propuestas que seguramente será del interés de la mayoría, es la sandía. Bien vale la pena aprovechar al máximo cada una de las características de la sandía, así que se la puede consumir en todo tipo de preparaciones o presentaciones, en donde se resaltan opciones como una ensalada, en un jugo, de manera natural, etcétera.
Entre las características que hacen de la sandía una buena herramienta para combatir las grasas saturadas, vale la pena resaltar que:
- Es prácticamente un 90% de agua, lo que significa que no sólo se trata de un gran aporte para la saciedad, sino que a su vez se va a conseguir con ella que la grasa saturada del cuerpo se pueda ir eliminando poco a poco.
- Uno de los datos interesantes de la sandía, es que una taza de sandía de 200 g aporta alrededor del 30% de la vitamina C que se necesita para un día.
- Es un alimento que destaca entre los demás por ser una excelente alternativa para aportar múltiples nutrientes, pues una buena ración de sandía le va a proporcionar al organismo potasio, hierro y vitamina B6.
- En la sandía se encuentra presente una sustancia denominada como licopeno, que es considerado como un muy buen antioxidante, ya que se trata de una excelente ayuda para favorecer la pérdida de peso en las personas y es además un factor clave para posibilitar la eliminación de las grasas saturadas que se encuentren en el cuerpo.
Almendras para combatir la grasa saturada
Casi todas las personas que escuchan sobre esta posibilidad se sorprenden, pues las almendras no es que gocen de una muy buena reputación dentro del sector de la nutrición, ya que se tiende a pensar que pueden elevar los niveles de grasa en el organismo.
Lo interesante de esta situación, es que de manera reciente se publicó un estudio en una revista científica internacional sobre obesidad, en la cual se demostró que las almendras, en caso de ser introducidas dentro de una dieta equilibrada y variada, van a ser un elemento que favorece la eliminación de las grasas saturadas.
Para que se comprenda mejor lo anterior, las almendras contienen compuestos que se encargan de limitar la cantidad de grasa que el cuerpo absorbe, mejorando así el modo en que opera el organismo.
En ese sentido, si las almendras se combinan bien, van a beneficiar la pérdida de peso. Por tanto, con 8 a 10 almendras en el desayuno o acompañando unas tostadas con un plátano, serán un muy buen ingrediente.